BORGES, UN LABERINTO INFINITO
El LABERINTO Borges toma la idea del laberinto griego como una metáfora que encierra la concepción de la vida como un camino sinuoso en donde a partir de nuestras elecciones decidimos diariamente la senda que recorremos. El laberinto se repite de manera simétrica, igual que ciertos pasajes en la existencia del hombre que vuelven a manifestarse de la misma forma ad infinitum. La temática del laberinto se desenvuelve a lo largo de la creación del autor, construyendo una serie de correspondencias simbólicas. Esta clase de instalación arquitectónica se abre a múltiples lecturas según el ángulo desde donde esté enfocada su concepción. Pero inevitablemente nos conduce de un emplazamiento físico a una dimensión temporal de carácter infinito donde el tiempo cíclico conforma el mito del retorno eterno. Borges cultiva la idea del laberinto: sus obras transmutan sueños en laberintos complejos y conmovedores a la vez. Según confesó una vez en una entrevista: “el laberinto simboliza que e...